Jo... Parece que fue ayer de aquello. Evidentemente, debía ser el día 6 o el 7 de julio de 1987. Bowie tocó en el Calderón el día 6, como parte de su Glass Spider Tour.
Es curioso que a muchos de los conciertos a los que asistí en aquellos momentos lo hiciera convencido de que el músico o grupo en cuestión al que iba a ver, estaba ya "en las últimas" y muy lejos de sus grandes momentos. Casi, casi, con ese sentimiento de que esa iba a ser la última oportunidad de verles, aunque fuera lejos de su explendor.
Así vi a Bowie o a Neil Young y Crazy Horse, en el 87, a Springsteen, en el 88, a los Rolling Stones y a Prince, en 1990....
Poco podía imaginar entonces que todos ellos siguieran en activo hasta estos mismos momentos, 25 o 28 años después, y que algunos de ellos, como Bowie, lo hicieran, hasta su fallecimiento, en mejor forma musical de lo que estaban entonces o que en otros casos lo hicieran con un nivel más que notorio.
Pobre Peter Frampton. El tipo, que debe ser alguien muy agradable y que no es mal guitarrista, se vió superado por el megabombazo que supuso Comes Alive. Algo que no pudo ni supo digerir. Elevó a la categoría de estrella a alguien que, evidentemente, no lo era.
La verdad es que en la gira de Bowie pegaba tanto como un Cristo con pistolas. Para nada tiene el perfil de los guitarristas que, habitualmente, han tocado con Bowie (Fripp, Alomar, Belew, Gabrels, EArl Slick...). Si acaso, podía dar un cierto toque a lo Mick Ronson, pero... ni eso.