Un
disco holandes de
progresivo sinfonico muy interesante es el
Song of the marching children, 1971, del grupo holandes
Earth and fire. Yo lo he descubierto hace poco tiempo al adquirirlo en vinilo nuevo.
Esta obra presenta una portada negra con los titulos escritos en color dorado. queda así la portada austera pero elegante.
El album se abre y nos presenta
un cuadro pintado a todo color. Sin duda, con los elementos que protagonizan los temas del disco, -unicornios, calaveras, el ojo de Dios, el principio de la vida, etc. etc.-
Este cuadro está partido en dos mitades. Una mitad pintada en tonos claros simbolizando talvez la claridad, la luz, el comienzo de la existencia ...y la otra mitad está pintada en tonos oscuros aludiendo a la parte oscura de la existencia. La pintura está llena de detalles para ser escudriñadaos- al igual que uno de esos cuadros de Picasso.-

Se escucha como si fuese un disco conseptual. Pero como no entiendo la letra, no estoy seguro, aunque lo intuyo.
La musica es intensa desde el principio y el nivel no decae en ningun momento manteniendose desde el comienzo hasta el final de las dos caras. Hay pasajes tranquilos y de intensa guitarra, y son capaces de crear abientes dramáticos

Hay un amplio despliegue de instrumentos que se escuchan a lo largo del disco: órgano, piano, molocotrones a mansalva!, syntetizador, flauta, vibrafono....
La cantante es una chica -Jerney Kaagman- que sabe imprimer dramatismo y canta de manera
impresionante.
Este disco bajo mi punto de vista lo tiene todo, buena voz, buena letra y buena musica, todos los temas son buenos, y voz de chica.
Del 1 al 10 le doy un 10