Yo me quedo también con la primera parte del concierto (y Nuria, que venía "a ciegas", también, por cierto) sin ninguna duda. La segunda parte me gustó, aunque hay algunos discos más modernos de la banda que no controlo (lo de
"Fox Hill" lo comenté con David a la salida del conci, a él le sonó a
Genesis, a mí a
Marillion, y en cualquier caso, aunque es un buen tema, es curioso cómo
Latimer deriva de su propio sonido al de otra de las grandes bandas de la época...), pero lo que se hizo notorio es la gran diferencia compositiva entre la primera época de
Camel (siendo muy estricto, mis discos favoritos llegan hasta el
"A live record") y las posteriores.
En el lado negativo, el batería no me gusta, no me pega en
Camel (ni siquiera en la regrabación de estudio del
"Snow goose" -que vinimos escuchando a la vuelta de Madrid ayer), y un público, si bien entregado, un tanto excesivamente ("festivalero", vamos): para el artista será muy emotivo, pero aplaudir al ritmo de las canciones o tararear (¡en trozos instrumentales!) en otros concis, allá cada cuál, pero viendo a
Camel... bien es cierto que se produjo de forma puntual (llegué a temer por el
"Lady Fantasy" entero
), o aplaudir entre temas del
"Snow goose" o después de los solos, todo un poco americano.
Pero vamos, que eso por decir algo negativo: disfrutamos como enanos, el
"Snow goose" (versión 2013) además de sonar de miedo fue muy emotivo,
Latimer está increíble, y en
"Lady Fantasy" he de reconocer que se me escapó alguna lagrimilla. Sin contar con el gran sonido del teatro y la posterior minirreunión: Nerwen, AnthonyGil, Patata´s y David Fresno, ¡un placer como siempre! Siento no haberte conocido, Kaspar.