¡Hola a todos
!
Hace relativamente poco que he conocido el debut discográfico de
Yes, y aprovechando que le he dedicado bastantes escuchas en las últimas semanas, me he leído la espléndida entrada en la Sinfopedia de Carlos
, la parte de los primeros años de la gran biografía de Marcos
y los diversos comentarios en el histórico del foro. Es cierto que no suele ser un álbum que goce de gran popularidad entre los aficionados al rock progresivo-sinfónico, pero como ya han comentado otros anteriormente, estoy de acuerdo en que es un álbum más que interesante (de hecho a mí me gusta mucho), sobre todo si se valora por todo lo bueno que ofrece y no por lo alejado que pueda estar de sus discos de mediados de los 70. Al hilo de algunos comentarios en los que se insinúa que si
Yes no hubiese seguido publicando discos su valoración sería mucho mayor, me viene a la cabeza el magnífico debut de
Supertramp (1970), y me pregunto también si su percepción hubiese sido otra si el grupo no hubiese alcanzado un notable éxito con su producción discográfica a partir de 1974. Aunque ambos grupos y discos tienen evidentes diferencias, creo que reflejan bien la frescura, creatividad e intensidad de su momento, en la búsqueda de su sello personal.
En la reedición de
Rhino, el libreto contiene un texto de
Tony Wilson (
Melody Maker) en el que señala que en la revista le pidieron que escogiera, a inicios de 1969, dos grupos que fuesen a estar a un muy buen nivel al año siguiente. Escogió a
Led Zeppelin y a
Yes. De estos últimos destaca que les vio en directo en una discoteca londinense, indicando de ellos que desprendían
vida, viveza y musicalidad.[...] Tenían un sonido vocal superior, seguro, limpio y armónico…. También habla de
arreglos imaginativos. A mí, desde luego esta formación me transmite una fuerte sensación de unidad grupal: el swing que desprenden
Bruford y
Squire, el empuje melódico y el arrope armónico de
Kaye y
Banks, la versatilidad y ductilidad vocal de
Anderson... por momentos me gusta más esta formación que la considerada "clásica" con
Howe,
Wakeman y
White, que siempre encontré menos empastada y con más tendencia al brillo solista.
Me gusta lo que comenta Carlos sobre la búsqueda de un equilibrio entre el factor vocal y el instrumental. Volviendo al libreto, en el texto se recogen algunas de las influencias de
Anderson y
Squire: las armonías vocales de
Beatles o
Simon & Garfunkel; el virtuosismo instrumental de
Hendrix; la capacidad de reelaboración de una pieza existente de
Vanilla Fudge. Me parecen referencias acertadas. También veo ciertas conexiones con
The Nice, sobre todo en cuanto al rol del órgano (salvando las distancias entre
Emerson y
Kaye), algunos
riffs y ritmos de herencia psicodélica (como la intro de "Every little thing") o la tendencia a las citas de autores clásicos (
Banks cita brevemente a
Bach en "I see you" o "Everydays"). Recuerdo haber visto alguna fotografía de
Yes y
The Nice en gira conjunta, en el libro
Close to the edge: the story of Yes, de
Chris Welch.
En el caso de este disco, creo que las versiones son un plus que demuestran los intereses del grupo y su manera de trabajar
Me gusta también cómo hacen alusiones a otras melodías del mismo grupo, casi a modo de homenaje (como en la versión de "Every little thing" de
Beatles, donde aparece el
riff de "Day tripper"), o la fantástica revisión de "Something´s coming", todo un tributo a
West Side Story (otra conexión con
The Nice) en el que se incluyen motivos de otras canciones como "America" o "Tonight", además de guiños a partes instrumentales de las
Danzas sinfónicas.
Aunque me gustan mucho todas las piezas, destacaría especialmente "Harold land" y "Survival", además de la preciosa balada "Yesterday and today", donde
Bruford interviene al vibráfono.