Comentario disco: Discipline

[MrBrain]

La puedes leer ---> Aquí

[Pantagruel]

Estoy escuchando algunas de las versiones que tengo para compararlas. Me oi primero la versión en vinilo de EG records versión de USA y después la mezcla del 40 anivrsario y la del 30 aniversario que vienen en el mismo DVD. Al principio creí incluso que había algo mal con el reproductor de DVD así que repetí la prueba, pero la versión en vinilo, aparte del huevo frito, me pareció mucho mejor sin lugar a dudas. La batería y el bajo que están muy presentes en el vinilo se aprecian como fondo en la mezcla nueva, como si se les hubiera ido la mano con la compresión. Este mismo defecto se nota en la versión del 30 aniversario pero no tan acentuado.

Después he visto en la página de Dynamic Range Database donde efectivamente corraboran este dato. La versión en vinilo tiene un DR de 13 mientras que la nueva, al menos la versión en estereo, tiene un DR de 9. Normalmente esta compresión se agrega no en la etapa de mezcla (Steve Wilson) sino en la de masterización (Simon Hetworth y Robert Fripp), pero lo extraño es que hayan decidido publicar la edición de esta forma, exactamente al contrario de las ediciones de "Islads" o del primer disco, por ejemplo.

Por otro lado estoy también viendo los videos del "Old Grey Whistle Test". Es increíble, esta era la escena Pop de los '80s, esto era lo que se oía en la radio, al menos en Inglaterra. Curiosamente la toma que nombran "live" están tocando con playback, y en las que nombran en "estudio" sí que están tocando. Al final mientras tocan "Indiscipline" aparecen los créditos donde se ve que compartieron el programa con Pat Benatar que venía a ser la Cristina Aguilera del Punk.

[icrp1961]

Sí señor, algunos vídeos son en playback.

[icrp1961]

Siguiendo adelante con el curso de King Crimson.
Terminan las versiones del trígesimo y cuadragésimo aniversario del grupo de Discipline

Treinta y cinco años ya, un clásico moderno en cualquier caso. El inicio del ciclo que llevó de 1981 a 2008.
Reseñar que aparte de los dicho sobre las distintas versiones de los diferentes aniversarios, en la edición del trigésimo encontramos la versión original de "Matte Kudasai" como bonus track, antes de que Fripp se automutilara eliminando su solo de guitarra en las siguientes ediciones distintas de la primera.
Un ejemplo temprano de "manipulación" crimsoniana, en este caso no debida a Wilson.

[icrp1961]

Este disco se publicó tal día como hoy hace 35 años.

[jolubur]

Este disco se publicó tal día como hoy hace 35 años.

Recuerdo perfectamente, no ese día, pero si el momento.
Yo, entonces, estaba estudiando la carrera. Para sacarme unas pelillas, los domingos montaba un puestecillo (ilegal, claro) en el Rastro, donde vendía grabaciones cutres que yo mismo hacía de cassettes y unos cuantos pendientes, collares y demás abalorios que un conocido argentino me había dejado antes de volver a su país, tras recorrerse media Europa vendiendo esos cachivaches.
Por supuesto, la cosa no daba para mucho. Uno de los domingos inmediatamente posteriores a la salida de Discipline, al acabar la jornada, como hacía todos los domingos, revolvía un poco por las cajas que, pocos metros más abajo, ponía discos Melocotón con novedades, discos descatalogados, rarezas no editadas aquí en España (lo cual era todo menos raro entonces) y esos piratones que tanto nos llamaban la atención.
En el cajón de las novedades dí enseguida con esa portada granate con ese extraño símbolo y me sorprendió sobremanera ver impreso el nombre de King Crimson.
Yo entonces no solía comprar demasiadas revistas musicales y, a falta de internet, era realmente difícil estar al tanto de futuros lanzamientos, como no fuera algo sobre lo que estuvieras muy pendiente.
Es evidente que King Crimson, tras llevar 7 u 8 años separados, no era, precisamente, un grupo sobre el que uno tuviera la mirada puesta.
Iba a preguntar si se trataba de algún pirata, pero, al darle la vuelta, vi que, junto al nombre de Robert Fripp y el de Bill Bruford, aparecía en de un viejo conocido mío, Adrian Belew (por sus colaboraciones con Bowie, sobre todo) y el de Tony Levin, por lo que deduje que era un nuevo disco. Tras confirmarlo, sólo pude rascarme el bolsillo y empeñar en ello toda la exigua ganancia de la mañana.
La primera reacción ante su escucha sólo pudo ser de... sorpresa, tiendo que mirar más de una vez la pegatina del vinilo para contrastar que, efectivamente, el plástico que giraba era de King Crimson.
Tras la sorpresa inicial, la devoción por un disco que me pareció fantástico de principio a fin.

[sahagun]

Este disco se publicó tal día como hoy hace 35 años.

Recuerdo perfectamente, no ese día, pero si el momento.
Yo, entonces, estaba estudiando la carrera. Para sacarme unas pelillas, los domingos montaba un puestecillo (ilegal, claro) en el Rastro, donde vendía grabaciones cutres que yo mismo hacía de cassettes y unos cuantos pendientes, collares y demás abalorios que un conocido argentino me había dejado antes de volver a su país, tras recorrerse media Europa vendiendo esos cachivaches.
Por supuesto, la cosa no daba para mucho. Uno de los domingos inmediatamente posteriores a la salida de Discipline, al acabar la jornada, como hacía todos los domingos, revolvía un poco por las cajas que, pocos metros más abajo, ponía discos Melocotón con novedades, discos descatalogados, rarezas no editadas aquí en España (lo cual era todo menos raro entonces) y esos piratones que tanto nos llamaban la atención.
En el cajón de las novedades dí enseguida con esa portada granate con ese extraño símbolo y me sorprendió sobremanera ver impreso el nombre de King Crimson.
Yo entonces no solía comprar demasiadas revistas musicales y, a falta de internet, era realmente difícil estar al tanto de futuros lanzamientos, como no fuera algo sobre lo que estuvieras muy pendiente.
Es evidente que King Crimson, tras llevar 7 u 8 años separados, no era, precisamente, un grupo sobre el que uno tuviera la mirada puesta.
Iba a preguntar si se trataba de algún pirata, pero, al darle la vuelta, vi que, junto al nombre de Robert Fripp y el de Bill Bruford, aparecía en de un viejo conocido mío, Adrian Belew (por sus colaboraciones con Bowie, sobre todo) y el de Tony Levin, por lo que deduje que era un nuevo disco. Tras confirmarlo, sólo pude rascarme el bolsillo y empeñar en ello toda la exigua ganancia de la mañana.
La primera reacción ante su escucha sólo pudo ser de... sorpresa, tiendo que mirar más de una vez la pegatina del vinilo para contrastar que, efectivamente, el plástico que giraba era de King Crimson.
Tras la sorpresa inicial, la devoción por un disco que me pareció fantástico de principio a fin.

Está muy chula tu anécdota. Muy entretenida y con muchos detalles que aún recuerdas. Yo descubrí el disco en 1989 con la caja de los 20 años de EG. En 1981 tenía 10 años.