Para gustos... ya sabes. En su día yo me harté/saturé del rock “convencional“ (siempre he sido bastante ecléctico y he tocado muchos palos), y volver al sinfónico que escuché en mi adolescencia, opción que barajé, me daba una pereza terrible. Eso, unido a que tengo un bar heavy y de hard rock, hizo que en casa dejase de escuchar música durante una buena temporada (sólo radio, y tertulias, etc., nada de música). Y en éstas andaba cuando descubrí a Magma, y Univers Zero y Shub-Niggurath, y detrás vino el zeuhl y el R.I.O. y sus diferentes estilos (entré en Sinfomusic, empecé a explorar y explotar internet...) y simplemente recuperé la pasión que siempre he sentido por la música, ese escuchar enajenado y hablar de grupos con una emoción apabullante. Este avant-prog es un cajón de sastre dentro de ese otro cajón de sastre que es el “Progresivo“, en cuya inmersión no parece haber límites: cuando se profundiza en cualquiera de los variados estilos, van apareciendo más y más, como si de fractales se tratase (y eso sin contar con que me sirve de puerta a un montón de nuevas e increíbles músicas); siendo además la música de vanguardia algo vivo y yo un tio inquieto y abierto, ¿cómo no me va a apasionar?