Tangerine Dream

[jolubur]

Bueno, parece que, tras años de espera, la fecha definitiva de la publicación de la voluminosa autobiografía de Tangerine DReam-Edgar Froese será el 6 de junio del año próximo (2017).
No hay mucho publicado sobre el grupo alemán y menos aún sobre Froese en solitario, pero, sobre todo, lo que hay suele centrarse en el período que acaba allá por los Melrose Years y suele estar lleno de bastantes tópicos. ESpero con ganas esta biografía que, espero, recoja la historia completa del grupo y parta de una perspectiva menos convencional. Sólo saldrá en alemán y en inglés. Por el momento no hay prevista traducción.
Por otra parte, parece que los tres miembros restantes del grupo (recordemos que dos de ellos son de reciente incorporación) y el tercero tampoco es que sea un "clásico" parecen dispuestos a seguir exprimiendo la naranja o la gallina de los huevos, no sé si de oro pero si al menos de bronce.
Junto a los conciertos (pocos por el momento) que han dado en 2016, bajo el jugoso y fácil slogan de "en tributo a Edgar Froese", parecen dispuestos a seguir con el elevado ritmo de discos anuales que el grupo ha mantenido en los últimos años.
Desde que falleciera Froese en Enero de 2015, es decir, hace menos de dos años, ya han sacado tres discos.
El primero es "Quantum Key", un EP de cuatro temas que forma parte de esa serie llamada "Cup Discs" y que se plantearon hace algunos años como complemento a los discos, digamos, más oficiales, recogiendo material disperso y de distinta índole. En este caso, se trata de temas que habían sido compuestos por o con Froese y que también son interpretados, según ellos, a modo de homenaje.
El segundo es el doble Live at the Philharmony Szczecin (Poland) en septiembre de 2016 (por tanto ya sin Froese), en uno de esos conciertos que, igualmente, se daban como "homenaje".
El tercero es el recientísimo "Particles", con el que, además, inauguran una nueva colección de dobles cup disc, o dobles eps que combinan material en directo con material de estudio.
Por supuesto, no tengo ninguno de estos discos, ni intención de comprarlos. Si es material de archivo anterior lo veo innecesario, habida cuenta de los cientos de referencias que ya existen, si se trata de material nuevo (sin Froese) lo veo una osadía y una falta de respeto, habida cuenta de que Tangerine Dream sin Froese no son absolutamente nada.

[jolubur]

Bueno, pues tras muchas idas y venidas, dimes y diretes, parece que, por fin, en septiembre, hay nuevo disco de estudio de larga duración de Tangerine DReam.
Si, ya sé lo que muchos pensáis (y comparto), que un grupo en el que falta el líder y todos son de, más o menos, reciente llegada, no pueden utilizar el nombre de Tangerine Dream en vano.
Por desgracia, es algo a lo que parece que tenemos que irnos acostumrando (TAngerine DReam, Gong, The Enid y otros casos, quizás menos sangrantes, pero también llamativos).
Sin embargo, en este caso, haré abstracción del nombre y pensaré que se han denominado Tangerine DReam Legacy porque lo cierto es que la pinta que tiene este disco es muy buena.
Hace algún tiempo, justo cuando falleció Froesse, sacaron un EP con cuatro temas que habían sido compuestos por Froese y que, por tanto, tenía un cierto carácter de obra postuma. Esos temas creo que se incluyen aquí junto con otros nuevos y, por lo oído en ese disco como en lo poco que he escuchado de su último disco en directo, la verdad es que sigue la línea de recuperación que se había marcado el grupo hace algunos años donde, por cierto, la figura de Froese era más testimonial que otra cosa.
La verdad es que tan penoso es utilizar el nombre de un grupo en el que ya no queda nadie, como mantener el grupo con algún fundador en plan momia, sólo para justificar la utilización del nombre.
ESto de la explotación de las marcas, en ocasiones, se está llevando demasiado lejos.
Lo cual no quita, ya digo, para que el disco, al final, sea bueno. Habrá que verlo.

[ronnie70]

buena noticia, he escuchado algo de estos nuevos TD y me ha gustado, estaremos al tanto.

[jolubur]

Lo de Eastgate, el sello que edita los discos de Tangerine Dream y Edgar Froese es algo ya de juzgado de guardia.
La autobiografía de Froese fue anunciada en preventa en 2013. Al parecer, Froese la estaba ultimando cuando falleció por lo que se abrió un lógico paréntesis para que otros finalizaran ese trabajo y dieran la revisión final. Se anunció que la publicación se retrasaría hasta finales de 2014.
Ni que decir tiene que no se ofreció posibilidad alguna de que los que habían pagado ya los nada menos que 50 euros (+ gastos de envío) que costaba (afortunadamente no estoy entre ellos) se retractaran.
A partir de ese momento se han sucedido diversos retrasos. En unos casos, sin información alguna sobre la nueva fecha y en otros anticipando una "fecha definitiva".
El año pasado anunciaron que, sin demora, se publicaría en febrero de 2017. Cuando se acercó esa fecha, se pidió disculpas y se dijo que, por problemas diversos tenían que retrasarla (esta vez si que sí) hasta el 6 de julio. Pues bien, ayer que entré en la página, me encuentro con que ahora que la "FINAL RELEASE DATE: 29th SEPTEMBER 2017".
Una auténtica tomadura de pelo.
Como algunos apuntan en diversos foros, en estos 4 años, muchos de los que anticiparon el dinero, se han cambiado de domicilio, incluso de país y, probablemente, alguno hasta haya lamentablemente fallecido.
Simplemente, uno no puede cobrar en preventa cuando el producto está tan en "barbecho" como estaba en este caso.
Me temo que la caja de Art Zoyd lleva el mismo camino, puesto que ya hace casi un año que, esta vez si, aboné el dineral que costaba sin que hasta el momento haya visto más que sucesivos anuncios de que "de momento no, pero, en seguida, no desesperen".

[DarkELP]

Como saben los miembros más antiguos del foro, yo he estado siempre en contra de comprar en preventa o similares.

[icrp1961]

Nunca he tenido problemas con discos adquiridos en preventa a través de Burning Shed, DGM o Amazon. Hasta ahora.

[jolubur]

No, si problema (en el sentido de no recibirlo) no es. La cuestión es la tomadura de pelo que supone el que te anuncien algo para una fecha y te lo demoren y demoren durante meses.
No es algo habitual, desde luego, en discos digamos "normales", pero, lamentablemente, no es del todo inusual cuando se trata de proyectos de mayor envergadura.
Sea como fuere, si se trata de discos de comercialización normal (y por normal, me refiero a que se vendan a través de la web sin mayores restricciones) veo un absurdo eso de adelantar un dinero durante un tiempo por algo que puedes comprar perfectamente el día que sale.
Un ejemplo palmario: el nuevo disco de Steven Wilson que lleva en preventa no se cuanto tiempo y que a buen seguro tendrás incluso en El Corte Inglés o en la FNAC el mismo día en que salga.
Aún recuerdo que compré en preventa en Amazon el "Cracked Actor" de Bowie, porque había oído que se trataba de una edición limitada, y, mientras esperaba a que me lo mandaran (tardó casi 15 días desde su fecha de publicación) lo estuve viendo en las citadas tiendas a un precio que, incluso, era un euro más barato. Un absurdo total.

[jolubur]

Tras revisar todos los álbumes de estudio (excluidos álbumes recopilatorios, remezclas, eps, etc.) y algunos directos de Tangerine Dream, debo concluir una vez más que la última década del grupo nos ha deparado una serie de perlas que nada tienen que envidiar a sus mejores años. Es verdad que, junto a estos 13 discos que reseño hay, por lo menos, otros tantos que van de lo simplemente interesante a lo directamente prescindible (incluso un par de ellos son completamente evitables). Pero ningún amante del TAngerine DReam clásico debería perderse ninguno de estos discos que señalo que, además, se ven beneficiados por una grabación perfecta de la que, sin duda, adolecían sus discos de los 70.
No me atrevería a recomendarlos abiertamente a quienes sólo disfrutan de la etapa más clásica del grupo (hasta Stratosfear) pero, sin duda, sí (rotundamente) a quienes disfrutan con discos como Logos, Force Majeur o Poland.
Para empezar, la fabulosa serie denominada "Five Atomic Seasons". Imperdible.

Igualmente (o más) reseñable es la serie de cuatro discos denominada "Easgate's Sonic Poem Series" cuyo objetivo era "ilustrar" musicalmente la lectura de algunas obras literarias.

Durante los primeros años de este siglo, Froese abordó las denominadas Tangentizaciones consistentes en regrabar algunos de los discos del grupo o en solitario de épocas pretéritas con resultados bastante funestos la verdad. Este de aquí nada tiene que ver con eso, seguramente porque el objetivo era distinto y la grabación también, ya que, en esta ocasión, se realizó en directo (aunque no se note). Se trata de un disco doble donde en el primer disco se interpreta en su integridad la banda sonora de Sorcerer (un clásico del grupo de los 70), mientras que en el segundo se interpretan una serie de temas que, ciertamente, no tengo muy claro si se trata de nuevas composiciones inspiradas en la película (al modo de lo que hizo Vangelis para la edición especial de Blade Runner) o temas descartados de entonces. Sea como fuera el resultado es simplemente espectacular. La calidad de grabación y la tensión de esta interpretación hace palidecer a la grabación original y uno sólo echa en falta que no se haya producido algo similar con obras como Phaedra o Rubycon, cuyas regrabaciones resultaron absolutamente planas.

Ahora vamos con dos directos. El primero (triple) es el último concierto grabado con Froese en el grupo. Es una selección de los temas que intepretaron en la última gira en la que participó, por tierras australianas.
En 2014, Froese decidió dar un giro a la música del grupo. Para ello, despidió a todos los miembros que venían formando parte de él y se quedó sólo con Thorsten Quaeschning, incorporando "a tiempo completo" a la violinista y teclista Hoshiko Yamane, que venía colaborando esporádicamente, y a al nuevo miembro Ulrich Schnauss. El objetivo era recuperar el espíritu del TD clásico, con la particularidad de que los 4 volvían a ser compositores además de intérpretes y dando de nuevo una prioridad absoluta a los teclados, eliminando percusiones, saxos, guitarras, etc, que solo muy ocasionalmente aparecerán a partir de ese momento.
Froese llamó a esta época los "Quantum Years" y en ella, al margen de recuperar sonoridades de los 70 y los 80 vinculó su música con los fractales y la física quántica. Si se escucha esta música se entiende tan aparentemente extraña asociación, ya que son motivos que parecen desarrollarse como los fractales, viajando hacia abajo y hacia arriba en motivos que se repiten pero que, sin embargo, siempre son distintos, al tiempo que aparecen nuevos motivos que aparecen aleatoriamente.
Este disco de Australia es uno de los primeros ejemplos de esta música donde se recuperan muchos temas clásicos, al tiempo que se introducen algunas nuevas composiciones.
Desgraciadamente, como se sabe, Froese falleció pocos meses después y el resto del grupo decidió continuar en algo que, por el momento, no está claro si intenta ser una especie de coda para dar salida a esas ideas que Froese ya tenía esbozadas o, como se indica en algún sitio, un nuevo comienzo a partir de tales ideas. Sea como fuere, uno de los primeros discos del grupo, ya como trio, es este concierto grabado en Polonia en el año 2016 que es espectacular. De nuevo, repertorio clásico y temas nuevos, con una calidad de grabación que resulta casi insultante.

Pero, como colofón a este viaje, no podemos dejar de lado el último disco del grupo y primer disco de larga duración (tras dos o tres EPs) del trio. Se trata de Quantum Gate. Un disco donde todos los temas vienen cofirmados por Froese y donde, según se dice, parten de ideas y bocetos dejados por aquel, al tiempo que se incorporan, incluso, algunas grabaciones que llegó a dejar (imagino que a partir de grabaciones en el ordenador).
Ciertamente no sé si esto es cierto, hasta que punto tienen trascendencia dichas ideas o si se trata simplemente de una solución de mercadotecnia para vincular al grupo con su creador y líder durante tantos años. Bien, lo cierto es que cuando se escucha el disco a uno le importa un pito todo esto y sólo puede disfrutar. ES, de largo, el disco que mejor suena de Tangerine Dream. Las composiciones se mueven en sonoridades que recuerdan ampliamente al período 76-88 y, salvo alguna excepción, son bastante inspiradas. Pero, sobre todo, la calidad de grabación es tal que hace que nunca hayamos oído a TD en estas condiciones y eso en este tipo de música es fundamental. Los bajos suenan profundos, las pulsaciones, los ritmos, las secuencias se meten por todas partes. Con auriculares o con un buen equipo es toda una experiencia. Ponemos este disco en nuestro equipo y parece que hemos comprado un equipo nuevo, lo que lleva a preguntar, a sensu contrario, porqué no todos los discos suenan como esto.
Particularmente, no me gustaría que el grupo siguiera con el nombre de Tangerine DReam, más allá de este "homenaje", tal y como lo presentan, pero este disco, por utilizar terminología de nuestro amigo Carlos, es de "los que hay que tener", vamos... como los otros 12.

Qué nadie diga que es seguidor de Tangerine DReam y no haya escuchado estos discos, es de recibo.

[jolubur]

Bueno, por fin me llegó el libraco. Tras no se cuantísimos años de retraso, por fin ha salido la autobiografía de Edgar Froese y Tangerine Dream.
El libraco es de gran formato (pesa más de kilo y medio) y tiene cerca de 400 páginas a doble columna y letra bastante comprimida, por lo que uno puede tirarse media hora en cada página, dando idea de la enorme cantidad de información que contiene.
El libro comienza con el relato del verano que pasó en Porlligat con Dalí y es francamente interesante su lectura.
Qué decir de este libro para cualquier amante de la música de Tangerine Dream. Un grupo que, además, ha sido bastante maltratado por la bibliografía. Hay pocos libros y bastante malos. Yo me hice hace algún tiempo con "Digital Gothic: Critical Discography of "Tangerine Dream" de Paul Stump y es simplemente penoso, con pocos datos, absolutamente manidos, sectario y, además, centrado sólo en su periodo más conocido
Odio esos libros biográficos de músicos o grupos que dedican un 95% a los años en que hicieron su trabajo más conocido y luego se ventilan de un plumazo otros 25 años con apenas dos páginas. Si uno compra un libro es porque está interesado en alguien y, ciertamente, le gusta conocer más de aquello que es más desconocido, no volver a leer lo que uno ya ha leído mil y una veces.
Incluye una sección central con numerosas fotografías y 5 páginas con reproducción de las carátulas de todos sus discos. Nada menos que 143. Aunque, luego, revisando en más detalle uno comprueba que no se incluyen ni los discos de archivo, ni los bootlegs, ni tampoco muchas de las bandas sonoras (todas las que no salieron editadas en los sellos discográficos en que en aquellos momentos estaba el grupo). Teniedo en cuenta esto, se puede calcular que la discografía completa de TD puede elevarse a cerca de 200 referencias.
Una discografía enorme, casi inabarcable, sin duda, en la que hay que surfear con bastante valentía porque, especialmente en el período 1990-2007 hay cosas muy chungas, aunque también maravillas ocultas de bastante calibre. Digamos que, si te gusta determinado período, hasta 1990 uno puede entregarse sin demasiados problemas. Más allá, es preciso, que cada cual se busque su particular Virgilio.
Por cierto, venía con ese EP de regalo

[jolubur]

Hilarante, interesantísimo y muy bien escrito el largo primer capítulo dedicado a su encuentro con Dalí en Portlligat.
Leyendo el detalle con el que relata las situaciones sólo puedo pensar que o Edgar Froese le pone mucha imaginación al asunto o tiene una memoria prodigiosa.
Bianca, su esposa, que hace un pequeño prólogo, hace mención a este segundo aspecto cuando dice que, al margen de que solía anotar muchos detalles, siempre le sorprendían los vívidos relatos de cosas que habían transcurrido hacía 20 o 30 años.
Desgraciadamente, cuando Froese falleció el libro estaba inacabado. No en la falta de retoques a lo que llevaba escrito, puesto que está perfecto, sino en el hecho de que el relato finaliza en torno a 1990. PAra algunos eso puede ser un alivio, para mi es algo muy triste, porque tenía mucho interés en ver la visión de Froese sobre esa parte de la historia que, generalmente, es obviada en las biografías sobre el grupo. Parece que tampoco esta vez va a ser.
Dado que en la parte central se incluyen fotografías de toda la historia del grupo y las portadas de todos sus discos, pensaba que la obra recogía todo el período... pero no.
Por contra, eso indica el nivel de detalle y de información que  se incluye sobre las algo más de dos décadas de vida del grupo que se recogen.

[tommy]

Tras revisar todos los álbumes de estudio (excluidos álbumes recopilatorios, remezclas, eps, etc.) y algunos directos de Tangerine Dream, debo concluir una vez más que la última década del grupo nos ha deparado una serie de perlas que nada tienen que envidiar a sus mejores años. Es verdad que, junto a estos 13 discos que reseño hay, por lo menos, otros tantos que van de lo simplemente interesante a lo directamente prescindible (incluso un par de ellos son completamente evitables). Pero ningún amante del TAngerine DReam clásico debería perderse ninguno de estos discos que señalo que, además, se ven beneficiados por una grabación perfecta de la que, sin duda, adolecían sus discos de los 70.
No me atrevería a recomendarlos abiertamente a quienes sólo disfrutan de la etapa más clásica del grupo (hasta Stratosfear) pero, sin duda, sí (rotundamente) a quienes disfrutan con discos como Logos, Force Majeur o Poland.
Para empezar, la fabulosa serie denominada "Five Atomic Seasons". Imperdible.

Igualmente (o más) reseñable es la serie de cuatro discos denominada "Easgate's Sonic Poem Series" cuyo objetivo era "ilustrar" musicalmente la lectura de algunas obras literarias.

Durante los primeros años de este siglo, Froese abordó las denominadas Tangentizaciones consistentes en regrabar algunos de los discos del grupo o en solitario de épocas pretéritas con resultados bastante funestos la verdad. Este de aquí nada tiene que ver con eso, seguramente porque el objetivo era distinto y la grabación también, ya que, en esta ocasión, se realizó en directo (aunque no se note). Se trata de un disco doble donde en el primer disco se interpreta en su integridad la banda sonora de Sorcerer (un clásico del grupo de los 70), mientras que en el segundo se interpretan una serie de temas que, ciertamente, no tengo muy claro si se trata de nuevas composiciones inspiradas en la película (al modo de lo que hizo Vangelis para la edición especial de Blade Runner) o temas descartados de entonces. Sea como fuera el resultado es simplemente espectacular. La calidad de grabación y la tensión de esta interpretación hace palidecer a la grabación original y uno sólo echa en falta que no se haya producido algo similar con obras como Phaedra o Rubycon, cuyas regrabaciones resultaron absolutamente planas.

Ahora vamos con dos directos. El primero (triple) es el último concierto grabado con Froese en el grupo. Es una selección de los temas que intepretaron en la última gira en la que participó, por tierras australianas.
En 2014, Froese decidió dar un giro a la música del grupo. Para ello, despidió a todos los miembros que venían formando parte de él y se quedó sólo con Thorsten Quaeschning, incorporando "a tiempo completo" a la violinista y teclista Hoshiko Yamane, que venía colaborando esporádicamente, y a al nuevo miembro Ulrich Schnauss. El objetivo era recuperar el espíritu del TD clásico, con la particularidad de que los 4 volvían a ser compositores además de intérpretes y dando de nuevo una prioridad absoluta a los teclados, eliminando percusiones, saxos, guitarras, etc, que solo muy ocasionalmente aparecerán a partir de ese momento.
Froese llamó a esta época los "Quantum Years" y en ella, al margen de recuperar sonoridades de los 70 y los 80 vinculó su música con los fractales y la física quántica. Si se escucha esta música se entiende tan aparentemente extraña asociación, ya que son motivos que parecen desarrollarse como los fractales, viajando hacia abajo y hacia arriba en motivos que se repiten pero que, sin embargo, siempre son distintos, al tiempo que aparecen nuevos motivos que aparecen aleatoriamente.
Este disco de Australia es uno de los primeros ejemplos de esta música donde se recuperan muchos temas clásicos, al tiempo que se introducen algunas nuevas composiciones.
Desgraciadamente, como se sabe, Froese falleció pocos meses después y el resto del grupo decidió continuar en algo que, por el momento, no está claro si intenta ser una especie de coda para dar salida a esas ideas que Froese ya tenía esbozadas o, como se indica en algún sitio, un nuevo comienzo a partir de tales ideas. Sea como fuere, uno de los primeros discos del grupo, ya como trio, es este concierto grabado en Polonia en el año 2016 que es espectacular. De nuevo, repertorio clásico y temas nuevos, con una calidad de grabación que resulta casi insultante.

Pero, como colofón a este viaje, no podemos dejar de lado el último disco del grupo y primer disco de larga duración (tras dos o tres EPs) del trio. Se trata de Quantum Gate. Un disco donde todos los temas vienen cofirmados por Froese y donde, según se dice, parten de ideas y bocetos dejados por aquel, al tiempo que se incorporan, incluso, algunas grabaciones que llegó a dejar (imagino que a partir de grabaciones en el ordenador).
Ciertamente no sé si esto es cierto, hasta que punto tienen trascendencia dichas ideas o si se trata simplemente de una solución de mercadotecnia para vincular al grupo con su creador y líder durante tantos años. Bien, lo cierto es que cuando se escucha el disco a uno le importa un pito todo esto y sólo puede disfrutar. ES, de largo, el disco que mejor suena de Tangerine Dream. Las composiciones se mueven en sonoridades que recuerdan ampliamente al período 76-88 y, salvo alguna excepción, son bastante inspiradas. Pero, sobre todo, la calidad de grabación es tal que hace que nunca hayamos oído a TD en estas condiciones y eso en este tipo de música es fundamental. Los bajos suenan profundos, las pulsaciones, los ritmos, las secuencias se meten por todas partes. Con auriculares o con un buen equipo es toda una experiencia. Ponemos este disco en nuestro equipo y parece que hemos comprado un equipo nuevo, lo que lleva a preguntar, a sensu contrario, porqué no todos los discos suenan como esto.
Particularmente, no me gustaría que el grupo siguiera con el nombre de Tangerine DReam, más allá de este "homenaje", tal y como lo presentan, pero este disco, por utilizar terminología de nuestro amigo Carlos, es de "los que hay que tener", vamos... como los otros 12.

Qué nadie diga que es seguidor de Tangerine DReam y no haya escuchado estos discos, es de recibo.

Muy bueno Jolubur!!! 

La pega es que decidí plantarme tras Poland (es mucha tela tanto disco) pero leyendo estas cosas dan ganas de seguir bueceando 

[jolubur]

Curioso que Poland fuera el disco del "plante" ya que es un disco maravilloso en mi opinión

[ronnie70]

De ultimo Tangerine Dream solo he escuchado y tengo la nueva version de Sorcerer y Franz Kafka castle, son dos discos magnificos y muy recomendables. He leido por ahi que este año sale un nuevo disco con reminisencias de la epoca clasica, suena bastante bien.

[jolubur]

De ultimo Tangerine Dream solo he escuchado y tengo la nueva version de Sorcerer y Franz Kafka castle, son dos discos magnificos y muy recomendables. He leido por ahi que este año sale un nuevo disco con reminisencias de la epoca clasica, suena bastante bien.

Si, ya ha salido. Es el último que pongo en el listado. Es muy bueno

[tommy]

Curioso que Poland fuera el disco del "plante" ya que es un disco maravilloso en mi opinión

Desde luego que es un disco maravilloso, es que vi la cantidad de discos que tenía por delante y decidí parar. Esta parada la hice coincidir con el fin de la "etapa Virgin" (disco Hyperborea) y el siguiente directo oficial que es Poland (e inicio de la "etapa blue years")

[ConOpus]

Excelente reseña y análisis de alguien que no solamente conoce bien al grupo, sino que (se percibe)  también lo ama.

Tras revisar todos los álbumes de estudio (excluidos álbumes recopilatorios, remezclas, eps, etc.) y algunos directos de Tangerine Dream, debo concluir una vez más que la última década del grupo nos ha deparado una serie de perlas que nada tienen que envidiar a sus mejores años. Es verdad que, junto a estos 13 discos que reseño hay, por lo menos, otros tantos que van de lo simplemente interesante a lo directamente prescindible (incluso un par de ellos son completamente evitables). Pero ningún amante del TAngerine DReam clásico debería perderse ninguno de estos discos que señalo que, además, se ven beneficiados por una grabación perfecta de la que, sin duda, adolecían sus discos de los 70.
No me atrevería a recomendarlos abiertamente a quienes sólo disfrutan de la etapa más clásica del grupo (hasta Stratosfear) pero, sin duda, sí (rotundamente) a quienes disfrutan con discos como Logos, Force Majeur o Poland.
Para empezar, la fabulosa serie denominada "Five Atomic Seasons". Imperdible.

Igualmente (o más) reseñable es la serie de cuatro discos denominada "Easgate's Sonic Poem Series" cuyo objetivo era "ilustrar" musicalmente la lectura de algunas obras literarias.

Durante los primeros años de este siglo, Froese abordó las denominadas Tangentizaciones consistentes en regrabar algunos de los discos del grupo o en solitario de épocas pretéritas con resultados bastante funestos la verdad. Este de aquí nada tiene que ver con eso, seguramente porque el objetivo era distinto y la grabación también, ya que, en esta ocasión, se realizó en directo (aunque no se note). Se trata de un disco doble donde en el primer disco se interpreta en su integridad la banda sonora de Sorcerer (un clásico del grupo de los 70), mientras que en el segundo se interpretan una serie de temas que, ciertamente, no tengo muy claro si se trata de nuevas composiciones inspiradas en la película (al modo de lo que hizo Vangelis para la edición especial de Blade Runner) o temas descartados de entonces. Sea como fuera el resultado es simplemente espectacular. La calidad de grabación y la tensión de esta interpretación hace palidecer a la grabación original y uno sólo echa en falta que no se haya producido algo similar con obras como Phaedra o Rubycon, cuyas regrabaciones resultaron absolutamente planas.

Ahora vamos con dos directos. El primero (triple) es el último concierto grabado con Froese en el grupo. Es una selección de los temas que intepretaron en la última gira en la que participó, por tierras australianas.
En 2014, Froese decidió dar un giro a la música del grupo. Para ello, despidió a todos los miembros que venían formando parte de él y se quedó sólo con Thorsten Quaeschning, incorporando "a tiempo completo" a la violinista y teclista Hoshiko Yamane, que venía colaborando esporádicamente, y a al nuevo miembro Ulrich Schnauss. El objetivo era recuperar el espíritu del TD clásico, con la particularidad de que los 4 volvían a ser compositores además de intérpretes y dando de nuevo una prioridad absoluta a los teclados, eliminando percusiones, saxos, guitarras, etc, que solo muy ocasionalmente aparecerán a partir de ese momento.
Froese llamó a esta época los "Quantum Years" y en ella, al margen de recuperar sonoridades de los 70 y los 80 vinculó su música con los fractales y la física quántica. Si se escucha esta música se entiende tan aparentemente extraña asociación, ya que son motivos que parecen desarrollarse como los fractales, viajando hacia abajo y hacia arriba en motivos que se repiten pero que, sin embargo, siempre son distintos, al tiempo que aparecen nuevos motivos que aparecen aleatoriamente.
Este disco de Australia es uno de los primeros ejemplos de esta música donde se recuperan muchos temas clásicos, al tiempo que se introducen algunas nuevas composiciones.
Desgraciadamente, como se sabe, Froese falleció pocos meses después y el resto del grupo decidió continuar en algo que, por el momento, no está claro si intenta ser una especie de coda para dar salida a esas ideas que Froese ya tenía esbozadas o, como se indica en algún sitio, un nuevo comienzo a partir de tales ideas. Sea como fuere, uno de los primeros discos del grupo, ya como trio, es este concierto grabado en Polonia en el año 2016 que es espectacular. De nuevo, repertorio clásico y temas nuevos, con una calidad de grabación que resulta casi insultante.

Pero, como colofón a este viaje, no podemos dejar de lado el último disco del grupo y primer disco de larga duración (tras dos o tres EPs) del trio. Se trata de Quantum Gate. Un disco donde todos los temas vienen cofirmados por Froese y donde, según se dice, parten de ideas y bocetos dejados por aquel, al tiempo que se incorporan, incluso, algunas grabaciones que llegó a dejar (imagino que a partir de grabaciones en el ordenador).
Ciertamente no sé si esto es cierto, hasta que punto tienen trascendencia dichas ideas o si se trata simplemente de una solución de mercadotecnia para vincular al grupo con su creador y líder durante tantos años. Bien, lo cierto es que cuando se escucha el disco a uno le importa un pito todo esto y sólo puede disfrutar. ES, de largo, el disco que mejor suena de Tangerine Dream. Las composiciones se mueven en sonoridades que recuerdan ampliamente al período 76-88 y, salvo alguna excepción, son bastante inspiradas. Pero, sobre todo, la calidad de grabación es tal que hace que nunca hayamos oído a TD en estas condiciones y eso en este tipo de música es fundamental. Los bajos suenan profundos, las pulsaciones, los ritmos, las secuencias se meten por todas partes. Con auriculares o con un buen equipo es toda una experiencia. Ponemos este disco en nuestro equipo y parece que hemos comprado un equipo nuevo, lo que lleva a preguntar, a sensu contrario, porqué no todos los discos suenan como esto.
Particularmente, no me gustaría que el grupo siguiera con el nombre de Tangerine DReam, más allá de este "homenaje", tal y como lo presentan, pero este disco, por utilizar terminología de nuestro amigo Carlos, es de "los que hay que tener", vamos... como los otros 12.

Qué nadie diga que es seguidor de Tangerine DReam y no haya escuchado estos discos, es de recibo.

[jolubur]

En la autobiografía de Edgar Froese se incluye un capítulo sobre la grabación de esta banda sonora que tiene algún elemento curioso.
Por lo pronto, destacar que se trata de la banda sonora para Shy People (vidas distantes creo que se llamó en castellano), una película de Andréi Konchalovski que no he visto pero que, al parecer, tuvo buenas críticas.
También merece aclaración lo de las dos portadas. La primera es la que corresponde al disco que apareció originalmente en 1988en el sello Varese Sarabande. Más recientemente  el sello Dragon's Domain reeditó, remasterizado y con temas adicionales, esta banda sonora, con esa otra portada, en una edición limitada de 1000 ejemplares, que es el que yo tengo y que se agotó rápidamente, por lo que en estos momentos tiene un precio bastante elevado.
Bien, quien haya escuchado esta excelente banda sonora se dará cuenta inmediatamente de que hay un tema que suena por todos los lados a Pink Floyd. A uno casi le sonroja el que el parecido con Wish you were here sea tan evidente. Un estilo que, por otra parte, tampoco es muy habitual en la música de Tangerine DReam.
Pues bien, en la autobiografía viene la explicación a este hecho. Al parecer, como suele ser habitual, el encargo para la banda sonora se produjo con unos plazos y unas condiciones que permitían todo salvo la pérdida de tiempo. Cuando Froese y compañía tuvieron medio acabada la música concertaron una reunión con el equipo de dirección para un visionado conjunto de imagen y música. Tras hacerlo, tanto el grupo como Konchalovski se mostraron satisfechos con el resultado. Sin embargo, ambos coincidían en que faltaba algo. Había alguna escena que no acababa de casar con la música.
Había poco tiempo para componer nuevo material y, de pronto, mientras pensaban cómo hacer a Konchalovski se le encendió la bombilla. "Esperad un momento, creo que tengo la solución". Al cabo de un momento, volvió con una casette que tenía en su coche y dijo "mirad, aquí tengo la música para esa escena, quiero meter esto".
"Esto" era wish you were here de Pink Floyd. Todos pusieron los ojos como platos. Primero porque Konchalovski no supiera quienes eran Pink Floyd y que ese disco se había vendido hasta la saciedad, pero sobre todo porque, evidentemente, utilizar ese tema en la película supondría pagar una cantidad desorbitada de royalties.
Al productor entonces se le ocurrió  la idea "vale, pues haced algo que suene como esto sin que sea esto".
A Froese y compañía esa solución no les gustó un pelo. Evidentemente, no les parecía ética, y tampoco se acercaba a lo que ellos creían que debía ser el papel de un compositor. Sin embargo, las presiones eran muchas. No sólo la falta de tiempo sino lo que Froese comenta en más de una ocasión en el libro: la tiranía de Hollywood. Si un compositor (o cualquier otro de quienes participan en una película, incluido el director) se niega a hacer algo de lo que los productores "sugieren" ya puede irse olvidando de que le vayan a contratar para una nueva película en Hollywood. Tangerine Dream, en especial en aquella época, estaban absolutamente volcados en el mundo de las bandas sonoras y no hacer aquello podía suponerles un serio revés, no sólo económico sino de proyección a la hora de afrontar nuevos trabajos. Al final, poco convencidos, acabaron por aceptar y en apenas un día compusieron y grabaron un tema que, como cualquiera puede apreciar es Wish you were here, sin ser wish you were here.
Este hecho no empaña que el propio tema sea una delicia y que el resto, aunque no tenga nada que ver con ese tema, sea una buena banda sonora.

[jolubur]

1988 fué el último año en el que Tangerine DReam funcionarion como trío. Desde que se estableciera la triada clásica de Froese-Franke-Baumann, los miembros fueron cambiando pero Froese se negó a cambiar la estructura de grupo como un trío de sentetizadores.
A Baumann le sustituyó Johannes Schmoelling y a éste Paul Haslinger, con algún que otro cambio menor.
Cuando, tras grabar Near Dark , Christopher Franke decidió dejar el grupo o, mejor dicho, fué largado por Froese, las premuras de tiempo y el haber fichado por la compañía de su antiguo compañero Baumann (Private Music) le impulsaron a grabar el disco Optical RAce como un dúo. Si bien, en un tema de este album ya aparece Ralph Wadephul que fué el elegido como sustituto de Franke de cara, sobre todo, a la gira americana que iba a comenzar en verano de ese año 88.
Desgraciadamente, diversos problemas personales del propio Wadephul hicieron que la cosa no cuajara y, al finalizar la gira, no continuó en el grupo, siendo entonces cuando Froese se plantea ya un nuevo formato que incluiría otros instrumentos y una profunda remodelación de la concepción de Tangerine Dream.
En 2003 se editó este Rockface, un fantástico disco doble que recoge íntegro uno de los últimos conciertos de esa gira americana de 1988, el que dieron en Berkeley el 24 de septiembre.
El concierto y la gira se concibieron como de presentación de Optical Race, sin embargo estos conciertos tenían un carácter más "integrador" que lo que presupone el propio disco de estudio y así, junto a temas de este album se incluyen versiones de Phaedra o Logos. Por otra parte, también se tocaron temas que no aparecen luego en ningún disco ni de estudio ni de directo, como el fantástico tema de piano Papyrus, que sólo por él vale la pena el disco.
Sin duda, se trata ya de otro Tangerine Dream, bastante alejado de los parámetros de los 70, pero sigue siendo un gran Tangerine Dream y, sobre todo, un gran disco que, además, suena de miedo y que es el último testimonio sonoro de la formación como trío. Absolutamente recomendable.

[ronnie70]

1988 fué el último año en el que Tangerine DReam funcionarion como trío. Desde que se estableciera la triada clásica de Froese-Franke-Baumann, los miembros fueron cambiando pero Froese se negó a cambiar la estructura de grupo como un trío de sentetizadores.
A Baumann le sustituyó Johannes Schmoelling y a éste Paul Haslinger, con algún que otro cambio menor.
Cuando, tras grabar Near Dark , Christopher Franke decidió dejar el grupo o, mejor dicho, fué largado por Froese, las premuras de tiempo y el haber fichado por la compañía de su antiguo compañero Baumann (Private Music) le impulsaron a grabar el disco Optical RAce como un dúo. Si bien, en un tema de este album ya aparece Ralph Wadephul que fué el elegido como sustituto de Franke de cara, sobre todo, a la gira americana que iba a comenzar en verano de ese año 88.
Desgraciadamente, diversos problemas personales del propio Wadephul hicieron que la cosa no cuajara y, al finalizar la gira, no continuó en el grupo, siendo entonces cuando Froese se plantea ya un nuevo formato que incluiría otros instrumentos y una profunda remodelación de la concepción de Tangerine Dream.
En 2003 se editó este Rockface, un fantástico disco doble que recoge íntegro uno de los últimos conciertos de esa gira americana de 1988, el que dieron en Berkeley el 24 de septiembre.
El concierto y la gira se concibieron como de presentación de Optical Race, sin embargo estos conciertos tenían un carácter más "integrador" que lo que presupone el propio disco de estudio y así, junto a temas de este album se incluyen versiones de Phaedra o Logos. Por otra parte, también se tocaron temas que no aparecen luego en ningún disco ni de estudio ni de directo, como el fantástico tema de piano Papyrus, que sólo por él vale la pena el disco.
Sin duda, se trata ya de otro Tangerine Dream, bastante alejado de los parámetros de los 70, pero sigue siendo un gran Tangerine Dream y, sobre todo, un gran disco que, además, suena de miedo y que es el último testimonio sonoro de la formación como trío. Absolutamente recomendable.

muy interesante, no conocia la existencia de este disco. Encontre en youtube un concierto en New Haven que no se si sera este mismo disco, coinciden lso temas.

[jolubur]

Es la misma gira pero de un concierto de unos dias antes en la Costa Este

[jolubur]

Por fin, ya tenemos portada, fecha y contenido para la caja "in search of hades", que recoge el período grande, 1073-1979 de Tangerine Dream.
Ciertamente, esperaba que incluyeran el 5.1 de todos los discos y, al parecer, tan sólo se incluyen los de Phaedra, Rubycon y el de la inédita (e incompleta) banda sonora para "Oedipus Tyrannus". Aún así, un material que cualquier aficionado al grupo debe tener.

https://www.musictap.com/2019/04/13/tangerine-dream-16cd-2bd-box-in-search-of-hades-the-virgin-recordings-1973-1979/