Lo que pasa es que pareces olvidar, Carlos, que la crítica es una actividad tan sujeta a la subjetividad como la propia obra que se critica. Una crítica no deja de ser una opinión subjetiva de alguien sobre algo.
El problema, en realidad no es problema, es que hay determinados críticos que tienen un gran prestigio y que su opinión sienta cátedra sobre muchos oyentes, pero, en realidad esto no responde sino a un criterio de "significancia" estadística. Si eso es así es porque el criterio de ese crítico suele coincidir con una buena parte de sus lectores o porque en base a determinados elementos estos lectores le han elegido como guía para que les descubra nuevas obras.
Ten por seguro que si, tras tres intentos, las obras recomendadas no gustan al lector, éste dejará de seguirle y de considerarle una referencia.
Lo que veo un tanto absurdo es que realice la crítica alguien que, a priori, se sabe que tiene aversión hacia determinado músico o estilo musical. Lo que ocurre es que tan negativo es eso como lo contrario, ya que a mi, particularmente, no me interesan la críticas laudatorias de quien pone por las nubes cualquier disco que saca su grupo favorito.
En definitiva, los críticos no son distintos a nosotros mismos. ¿qué hacemos nosotros?. Entramos en un foro, leemos lo que la gente va escuchando y, generalmente, nos dejamos aconsejar y prestamos atención a aquellas cosas que vienen recomendadas por aquellas personas que, en el pasado, han demostrado una mayor afinidad con nuestros gustos.
Si, por probar, prestas oídos a las recomendaciones de alguien y, sistemáticamente, aquello te parece un bodrio, automáticamente le borras de tu lista de posibles "referencias" y miras hacia otro lado.
Ten en cuenta, además, que tu, como mucha de la gente que escribe aqui tiene a sus espaldas miles ymiles de horas de audición y de discos escuchados, por lo que su criterio comparativo está mucho más formado (o deformado, porque ese sería otro tema de debate), pero lo habitual es que la gente tenga una formación mucho menor y, en consecuencia, aprecie ese tipo de recomendaciones.
Lo que no hay es que darle más importancia y ya se sabe, frente a algo, habra quien lo odio, quien lo ame y a quien le resulte indiferente.
Lo importante es al final de cuentas, la opinión de cualquier crítico no es un hecho, y por lo mismo no tiene que tomarse así. Esto es cierto aún y cuando tuviesen un criterio formado por años de escuchar música y cientos de discos descubiertos. En el fondo siguen siendo apreciaciones subjetivas. No obstante, siempre habrán medios más tendenciosos que otros, y críticos más imparciales que otros. Está en uno mismo darse cuenta de ello, y seleccionar la información de las fuentes que uno considera confiables. También resulta útil consultar diversas fuentes, no quedarse con una sola.
Os contaría unas cuantas anécdotas, como aquél gurú del periodismo musical guipuzcoano que nos llamó "dinosaurios" mientras nos autoproducíamos el primer disco con un crédito de un millón de pesetas avalado por mi suegra...
«Se cuenta la anécdota de un crítico berlinés que, tras la ejecución de un cuarteto de cuerda de Beethoven, sentenció: "El señor Beethoven no alcanzará nunca la suavidad y agilidad de los cuartetos de Kozeluch".»Algo similar dijo alguna vez otro "iluminado" sobre Robert Schumann.
("Mozart, su vida y obra", Ramón Andrés)
Hablando de críticos con mala sombra, me ha venido a la mente, una de las mas duras que he leído, y es que cuando al director de orquesta Sir Thomas Beecham, le preguntaron si había oído algo de la música de Stockhausen, este contestó, "no, pero creo que alguna vez la he pisado".Si que tiene mala leche, si.. Pero también tiene su gracia.
Estoy muy de acuerdo contigo, Luis.Yo no soy un crítico, yo sólo intento comprender el proceso. Y escribí el libro, que es fractal y autocontenido, como si fuera literatura, pese a que su contenido es perfectamente real y no de ficción. Está contado de la manera que lo hace un escritor, no un crítico.
Es más, tenemos un ejemplo muy cercano. Si no hubiera sido por Carlos, yo nunca habría llegado a entender a King Crimson como luego lo hice. Y Carlos... también es crítica.
en otros ambitos no se si tendran mas o menos cabida, pero en la musica los criticos son a dia de hoy totalmente prescindibles....solo hay que ver como la linea entre critico y aficionado se ha estrechado de una forma donde en un % alto de los casos el critico practicamente pisa la zona del aficionado y el aficionado pisa la zona del critico, carece de sentido.Una apreciación bastante curiosa, me ha hecho reflexionar.
Efectivamente, es así. DE hecho, la única posible diferencia es que el crítico, por el simple hecho de serlo, tiene una "credibilidad" de la que carece, quizás un aficionado, cuya opinión es más "puesta en duda". Aunque, en el fondo, como apuntáis, esto cada vez es menos así, ya que los críticos tienen cada vez menos credibilidad, al tiempo que hay aficionados que tienen un cierto "prestigio", al menos entre su círculo de conocidos, y cuya opinión es tomada muy en cuenta.en otros ambitos no se si tendran mas o menos cabida, pero en la musica los criticos son a dia de hoy totalmente prescindibles....solo hay que ver como la linea entre critico y aficionado se ha estrechado de una forma donde en un % alto de los casos el critico practicamente pisa la zona del aficionado y el aficionado pisa la zona del critico, carece de sentido.Una apreciación bastante curiosa, me ha hecho reflexionar.
Me parece que, efectivamente, es así.
En su día hubo críticos que eran mas bien gurús. Ya ha terminado esa época.
Aunque, lo cierto es que también tenemos que tener en cuenta que nos movemos en un círculo donde los aficionados tienen un cierto "nivel" que, quizás, no se da en otros ámbitosLo mismo podrían decir los que se mueven en los círculos de la literatura fántástica y ciencia ficción.
Si, claro. Si lo de "ámbitos" no lo decía por otras "disciplinas" sino por otros "ámbitos musicales" donde la gente, habitualmente tiene un conocimiento menos profundo de la música que está escuchando y donde, en consecuencia, el papel de "gurú" que puede ejercer determinado crítico, quizás, tenga más predicamento que en otro donde el nivel de los aficionados hacen que estos tengan sus opiniones bien sustentadas.Aunque, lo cierto es que también tenemos que tener en cuenta que nos movemos en un círculo donde los aficionados tienen un cierto "nivel" que, quizás, no se da en otros ámbitosLo mismo podrían decir los que se mueven en los círculos de la literatura fántástica y ciencia ficción.