Me sorprende la inquina con Wilson, que si plagio de ABBA o la ELO, cuando Wobbler, por ejemplo, que suenan a Yes descaradamente son encumbrados por muchos a mejor disco del año.
Repitto que me gusta Wobbler y no tengo nada en contra de ellos pero no entiendo que lo que vale para unos no valga para otros.
Lo volví a escuchar anoche, el de Wobbler, y lo que comentas de Yes no lo escucho por ningún lado, ni las guitarras, ni los teclados, ni las voces, salvo el bajo, que suena influido por Squire. Ni por la manera de componer.
Sólo encuentro trazas evidentes de Gentle Giant en el final del disco.
Yo he escuchado sus tres últimos discos (me falta el primero). Su segundo disco, Afterglow, está muy influido por Gentle Giant, de una manera muy evidente aunque no tanto como la que Yes tiene sobre su tercer disco, Rites at Dawn, donde yo creo que la influencia llega hasta el título. Vamos que ese disco, con una portada de Roger Dean sería el perfecto disco perdido de Yes.
En su último álbum, From silence to somewhere, aprecio, sobre todo, un salto cualitativo muy importante. Si en los dos anteriores (supongo que en el primero también) es claro que su deseo es "sonar como.....", en este comienzan a tener un sello propio y las influencias aparecen más integradas en un discurso, si no más original, si más personal.
Yo aquí las influencias de Gentle Giant las noto menos (aunque todavía queda algo) y sí noto mucho más las de Yes (aunque, desde luego, no tanto como en el disco anterior). La estructuración de los temas, la forma de atacar algunos pasajes a mi me recuerdan mucho a Relayer.
Creo, no obstante, que este disco es suficientemente personal como para que no se les catalogue de mera copia, y, en todo caso, hay que reconocer que el disco es bueno, tanto a nivel compositivo como de interpretación.