Bueno, pues tas unbpar de atentas escuchas al "to be bone" de Wilson tengonquendecir que, en lineas generales, me gusta.
Nones su mejor disco, eso está claro, pero no crwo que merezca las despuadadas criticas de algunos
Al final he caído. Lo he escuchado cuatro veces. Confirma mis peores temores. Es como el "..and then there were three..." de su autor.
Escuchado lo escuchado, el único tema que me parece sincero y que llama la atención es "Permanating", el resto es más sobre lo mismo ya conocido y algo simplificado, como pasó con Genesis, pero sonando rotundamente a Wilson, claro. Incluso el tema "largo" (¿progresivo?) lo es por que lo alargan con una sección repetitiva que alberga un solo de guitarra y que no aporta nada. Muy bien producido y grabado, eso sí.
Como hubiera dicho Paco Peiró en su libro La madrugada eterna, lo que en otros discos era "excipiente" se convierte ahora en lo que se ofrece como "principio activo".
Ahora, despellejadme.
Yo también he escuchado ya el disco algunas veces más y me reafirmo en mi opinión. Me parece un buen disco. Es más, con sucesivas escuchas me parece cada vez mejor.
En todo caso, al margen de opiniones, todas ellas respetables... y subjetivas, siempre que se habla del señor Wilson se me plantea la duda de porqué determinados personajes en el mundo del rock parecen despertar, no ya opiniones contrarias, sino susceptibilidades donde más pareciera que, en lugar de ser músicos que sacan un disco de vez en cuando, se tratara de personas que poco menos que están amenazando a nuestra madre con un cuchillo.
Lo cierto es que, leyendo críticas y reseñas de los últimos trabajos de Wilson, nunca parece acertar, aunque su propuesta sea en cada caso la contraria de la anterior. Si saca un disco de homenaje al rock progresivo setentero, alguien le ataca porque no aporta nada a aquel movimiento y carece de autenticidad, si saca un disco pop, alguien le critica porque se ha alejado de sus parámetros en busca del dinero fácil y se ha "vendido" al sistema"; si simplifica sus estructuras pero mantiene la esencia alguien le critica porque es repetitivo....
Lo cierto es que, ya digo, hay personajes que, para algunos, parece que cada trabajo que sacan fuera una especie de "ofensa personal".
Hay algunos casos notables en la historia del rock. El más famoso, desde luego, es el de Phil Collins. Alguien que pareciera que más que hacer música estaba siendo el inductor de un plan para reinstaurar el nazismo en Europa. El calificativo de "el puto enano" es, seguramente, el más leve que he escuchado en relación con este hombre desde los postulados del fan progresivo "de pura cepa".
En los tiempos recientes, ese papel parecen jugarlo al alimón Steven Wilson y el señor Steve Hogarth, a la sazón cantante de Marillion (parece que entre Stevens va la cosa).
Sería tan sencillo como decir, "miren ustedes, a mi estos dos señores no me gustan y no me interesa lo que hacen", pero, en lugar de eso, pareciera que hay que combatirlos, fumigarlos y extirpar su presencia de la faz de la tierra, ya que su nefasta influencia puede afectar al normal desarrollo del delicado equilibrio intraplanetario.
Lo de Hogarth ya es de juzgado de guardia. No es que sustituyera a Fish y que para algunos eso supusiera que dejara de interesarles Marillion, no; es que, al parecer, el señor Hogarth vertió algún tipo de pócima en la copa de Fish para que este enfermara, hacerse así con el trono del afamado grupo y llevar a este por los derroteros del terrible pop sinfónico que tan nefastas consecuencias tiene entre la juventud, al tiempo que en cada uno de sus conciertos deja deslizar imágenes subliminares que convierten a sus ocasionales espectadores en zombies musicales que pierden cualquier tipo de criterio objetivo para valorar, de ahí en adelante, las bondades del verdadero, auténtico y original rock progresivo.