Hablando en plata.
Jean Sibelius tocó muchos palos. Compuso canciones y mucha música para piano. Pero, siempre será recordado por su música sinfónica y concertística para violín. Es decir, las sinfonías, los poemas sinfónicos y el concierto para violín.
Él hubiera querido ser un virtuoso del violín, pero como no pudo llegar a ese nivel, se dedicó a componer. ¡Y cómo!
La crítica germanófila siempre le ha despreciado y encontró sus mejores valedores en el Reino Unido y en los Estados Unidos. Sin embargo, su obra siempre ha estado presente en las programaciones de las orquestas. Incluso en los círculos más vanguardistas ahora se le incluye como antecedente del espectralismo.
Por cierto, tenía una manera de escribir muy particular, a través de pequeños motivos melódicos que van engranándose entre sí a lo largo de la pieza.