Es un asunto complejo elegir este año
el mejor disco (o
los mejores discos) del 2019. Ya hace un tiempo que vengo repasando todo lo expuesto en el
Portal y, dependiendo del estado de ánimo que uno tenga en un día determinado, se elige
uno u otro ejemplar. A veces se necesita el rock
más tremendo y sin pausas, en otras el delicado new age nos hace vibrar el alma como una vara, y hay momentos en que el jazz-rock nos lleva a una dimensión de disfrute sin igual. Estimo que en estos días que se avecinan finalmente me decidiré a publicar mis preferidos construyendo con ellos
una planicie y no una pirámide. Imposible, entre tantos géneros y estilos, individualizarlos en una lista con orden numérico. Y, por su cantidad, se torna
cuesta arriba cualquier intento de compararlos entre sí.
Lo que puedo asegurar, sin duda, es que
este álbum estará entre los mejores. Es un disparate de inspiración e imaginación. He aquí sólo una muestra. (El resto, ya saben dónde).